Frases de Rafa Dedi

Las leyes no las deberían hacer los poderosos sino los débiles, aunque sólo sea porque ellos están más necesitados de justicia.

La Justicia a medida nunca puede ser la medida de la Justicia.

Me reconozco injusto: ése es el único lujo que la Justicia debería permitirse para sí misma, no para los demás.

Creo que la Justicia, muchas veces, es injusta; yo, también lo soy. Pero yo soy un parte y la Justicia debe se un todo que, por culpa de un trocito podrido, no puede consentir que todo se pudra.

La injusticia del silencio es esa justicia a la que asentimos sabiendo que es injusta.

Nadie entiende, justamente, que para la Justicia, dos personas iguales, en un mismo sitio, uno no quepa y al otro le sobre espacio por todas las partes.

Hasta cuando la Justicia es justa, las interpretaciones las realizan los intereses.

La Justicia, o va desnuda y es prostituta gratis para todos o va vestida y sólo es la furcia de los que le regalen la ropa.

De ninguna manera es justo el que pide que se sea injusto con el contrario.

Muchas veces creo que nos están juzgando con el culo de la Justicia.

No hay muchas justicias: sólo hay una, que se mira de distintas formas.

Para muchas personas sólo es justo un lado de la Justicia, el suyo.

El trabajo de los abogados no consiste en ayudar a la Justicia, sino en confundirla interesadamente.

Los abogados son los mejores aliados de la Justicia injusta.

El que ejerce la Justicia injusta, comete dos pecados gravísimos: ser injusto y ser consciente de que lo es.

El justo, para ser justo, no tiene que ser injusto con los injustos pero tiene que rebelarse contra la Justicia injusta.

Las leyes, muchas veces, son una traba para la Justicia justa.

Nadie entiende que la injusticia gane a la Justicia tantas veces, como no entendería que durante la noche saliera el sol.

La Justicia de los hombres no es perfecta, no porque no pueda serlo, sino porque a muchos les interesa que no lo sea.

En la Justicia, las interpretaciones, sobran: no se puede ser más o menos justo; hay que ser justo, a secas.

La Justicia no puede ser injusta, igual que lo blanco no puede ser negro; el cielo, la tierra o Dios, el Demonio.

El que sabe que la Justicia es injusta y la imparte, es como el que sabe que se va a ahogar si se tira a un pozo y se tira.

Una Justicia que no es la misma para todos, es igual que una mesa con patas, cada una, de distinta longitud: ni se puede ni se debe sostener.

Si no hay justicia justa, no hay justicia.

La Justicia, cuando no es justa, es la peor de las injusticias.