Los científicos habitualmente quejarse de que el público no los entiende. Pero se quejan demasiado: la ignorancia del público no es exclusivo de la ciencia. Es triste que algunos ciudadanos no pueden decir un protón de una proteína. Pero es igualmente triste si son ignorantes de la historia de su nación, no puede hablar un segundo idioma, o no puede encontrar Venezuela o Siria en un mapa.
Frase de Tristeza | Martin Rees