Iniciamos el camino hacia la derrota adversario real de México, que representa el autoritarismo y la práctica antidemocrática peor, que representa un retorno a la corrupción como sistema y la impunidad como condena. Ese adversario es Peña Nieto y su partido.
La regla de la utilización de la fuerza es la siguiente: si tus fuerzas son diez veces superiores a las del adversario, rodéalo; si son cinco veces superiores, atácalo; si son dos veces superiores, divídelo.
Hacerte invencible significa conocerte a ti mismo; aguardar para descubrir la vulnerabilidad del adversario significa conocer a los demás.
Lograr que el ejército sea capaz de combatir contra el adversario sin ser derrotado es una cuestión de emplear métodos ortodoxos o heterodoxos.
El arte del liderazgo... consiste en la consolidación de la atención de las personas contra un solo adversario, cuidando de que nada va a dividir esa atención.
Para lesionar a un adversario es lesionarse. Para controlar la agresión sin infligir daño es el Arte de la Paz.
Dieciocho hoyos de juego por hoyos le enseñará más sobre su adversario de 18 años de tratar con él a través de un escritorio.
Los que se preparan para la venida de Cristo deben ser sobrios, y velad en oración, porque nuestro adversario, el Diablo, anda en derredor como león rugiente, buscando a quien devorar, al cual hemos de resistir firmes en la fe.
El arte del liderazgo ... consiste en la consolidación de la atención de la gente contra un solo adversario y teniendo cuidado de que nada va a dividir esa atención.
Si no acusan unos a otros, Dios no va a acusar a usted. Si usted no tiene adversario te va a entrar en el cielo. Lo que mucha gente llama el pecado no es pecado, hago muchas cosas para romper la superstición, y voy a romperla.
El adversario estratégico es el fascismo... el fascismo en todos nosotros, en nuestra cabeza y en nuestro comportamiento diario, el fascismo que nos hace amar el poder, desear la misma cosa que domina y nos explota.
Pensando sólo comienza cuando hemos llegado a conocer esa razón, glorificado por siglos, es el adversario de dura cerviz del pensamiento.
Cuando alegre al argumento que yo venga, aunque armado con hechos y alegres, Que la Providencia me proteja de El necio como adversario, cuyo pensamiento para él un reino es donde está la razón carece de dominio, que llama perjuicio convicción y opinión prejuicios.
Los orgullosos hacen de toda persona su adversario oponiendo a su intelecto, opiniones, trabajos, posesiones, talentos, o cualquier otro dispositivo de medición mundana contra otros.
Los hombres entienden las discusiones como el arte de hacer callar al adversario; las mujeres como el arte de no dejar la posibilidad de hablar.