La historia está llena de muy buenas historias. Esa es la razón principal por la que me metí en este negocio: Quiero hacer el argumento de que la historia es interesante.
Creo que hay un montón de cosas interesantes en la televisión. Me siento mucho más optimista acerca de la televisión que yo sobre las películas. Siempre habrá buenas películas, pero creo que, en su mayor parte, que siempre va a ser una gran pelea para conseguir esas películas hechas. TV es el mejor lugar para estar como escritor, creo.
También es una cuestión de encontrar buen material y papeles interesantes. No soy la única actriz que hay, y las buenas partes simplemente no caer en su regazo tan fácilmente. Pero más me gusta de las películas que he hecho recientemente y así que estoy bastante positiva sobre el futuro.
Una de las cosas buenas y malas sobre Nueva York es que hay tantas cosas emocionantes y tanta gente haciendo algo interesante. De hecho, me encuentro en Nueva York, que se vuelven más ambicioso y más centrado en lo que es el más nuevo, lo más de moda.
Se supone que debemos disfrutar de las cosas buenas ahora, mientras podamos, con la gente que amamos. La vida tiene una forma graciosa de enseñarnos la lección una y otra vez.
No me gustó el cocinero desnudo. Bien, sí, él hizo cosas buenas para la comida de la escuela o lo que sea, pero, ya sabes, no quiero que mis chefs a ser lindo y adorable.
Al llegar a ese nivel, no es una cuestión de talento más - porque todos los jugadores tienen mucho talento - se trata de la preparación, de jugar inteligente y tomar buenas decisiones.
Las buenas noticias sobre mostrando chefs y los programas de televisión se han atraído una gran cantidad los niños más inteligentes a la profesión que hace 30 años. En el lado negativo, sin embargo, estos jóvenes cocineros todos dicen que quieren que su propio restaurante y su propio programa de televisión.
Amo los fans de reuniones. Ellos siempre son divertidos, siempre tienen cosas buenas que decir, preguntas inteligentes para pedir, y un montón de ideas para mí para explorar en el futuro.
Demos gracias a Dios por los pensadores de buenas y nobles pensamientos! Se despierta todo lo mejor en nosotros mismos, para estar en contacto cercano con otras personas mayores y mejores en todos los sentidos que nosotros.
Una montaña se compone de pequeños granos de tierra. El océano está formado por diminutas gotas de agua. Aun así, la vida no es más que una serie interminable de pequeños detalles, acciones, discursos y pensamientos. Y las consecuencias buenas o malas de incluso el más pequeño de ellos son de largo alcance.
Pensando buenos pensamientos no no es suficiente, hacer buenas obras es suficiente, ya que otros sigan sus buenos ejemplos es suficiente.
Que cada uno piense a sí mismo un acto de Dios, su mente un pensamiento, su vida, el aliento de Dios, Y que cada intento, por grandes pensamientos y buenas acciones, para mostrar la mayoría de los Cielos que tiene en él.
He estado por tanto tiempo y no importa si he hecho cosas buenas o cosas malas, o mi vida personal ha sido buena o mala, los fans siempre he quedado conmigo.
Tengo muchas ganas de jugar el papel más sustanciosos que recibe en sus 30 años. Los 20 años de edad puede ser un momento difícil para una actriz - que siempre es explosiva o romántico plomo. Las cosas buenas que realmente puede hincar el diente viene después.
The Deep South tiene una historia completamente diferente, tanto buenas como malas, que es fascinante para todos. Hace que las personas trabajan juntas, que por lo general no lo hacen, y que suena como un cliché de muchas maneras, pero lo que realmente sucedió... y sucedió a causa de una hermosa idea.
A quien las buenas obras no aprovechan y las tiernas palabras no mueven, las malas le domen con duro y riguroso castigo.
Las buenas costumbres, y no la fuerza, son las columnas de las leyes; y el ejercicio de la justicia es el ejercicio de la libertad.
Una de las ventajas de las buenas acciones es la de elevar el alma y disponerla a hacer otras mejores.
La abundancia de las cosas, aunque no sean buenas, hacen que no se estimen, y la carestía, aun de las malas, se estima en algo.
Todas las buenas maneras tienen que principiar compartiendo alguna cosa con sencillez. Dos hombres tienen que compartir un paraguas; si no tienes un paraguas, tendrán por lo menos que compartir la lluvia, con todas sus ricas posibilidades de humor y de filosofía.
Al tratar del Estado debemos recordar que sus instituciones no son aborígenes, aunque existieran antes de que nosotros naciéramos; que no son superiores al ciudadano; que cada una de ellas ha sido el acto de un solo hombre, pues cada ley y cada costumbre ha sido particular; que todas ellas son imitables y alterables, y que nosotros las podemos hacer igualmente buenas o mejores.