Dios prepare todo para nuestra felicidad perfecta en el cielo, y si se necesita mi perro estar ahí, creo que va a estar allí.
Nunca he hecho pero una oración a Dios, muy breve: "¡Oh Señor que mis enemigos ridículos. Y Dios le concedió.
Un voto es un acto puramente religioso, que no se puede tomar en un arrebato de pasión. Se puede tomar sólo con la mente purificada y compuesta y con Dios como testigo.
Yo ahora prefiero ver la raza humana extinta que debemos ser menos que bestias de hacer la más noble de la creación de Dios, mujer, el objeto de nuestro deseo.
Lo sé, para desterrar la ira por completo del pecho de una persona es una tarea difícil. No se puede lograr a través de esfuerzo personal puro. Se puede hacer sólo por la gracia de Dios.
Cuanto más nos acercamos a cabo y hacer el bien a los demás, más nuestros corazones serán purificados, y Dios estará en ellos.
Gracias a Dios cada mañana cuando te levantas de que tiene algo que hacer ese día, lo que se debe hacer, ya sea que les guste o no.
No puedo y no se retracta nada, para ir en contra de la conciencia no es ni justo ni seguro. Aquí estoy, no puedo hacer otra cosa, que Dios me ayude. Amen.
Infinite tratando de ser el mejor es el deber del hombre, sino que es su propia recompensa. Todo lo demás está en manos de Dios.
Es absurdo y erróneo llorar a los hombres que murieron. Más bien debemos dar gracias a Dios que a tales hombres vivían.
Qué pedazo de trabajo es un hombre, ¿cómo noble en razón, cómo es infinito en facultades, en la forma y la mudanza de cómo es expreso y admirable, en la acción cómo como un ángel, en la aprehensión cómo como un dios.
Podemos estar cansados, cansados y emocionalmente perturbado, pero después de pasar tiempo a solas con Dios, nos encontramos con que él inyecta en nuestro cuerpo la energía, el poder y la fuerza.
He tenido muchas cosas en mis manos, y yo he perdido a todos, pero lo que yo he puesto en manos de Dios, que todavía poseo.
Dios, nuestro Creador, ha almacenado dentro de nuestras mentes y personalidades, gran fuerza potencial y capacidad. La oración nos ayuda a TAP y desarrollar estas competencias.
Mi religión se basa en la verdad y la no violencia. La verdad es mi Dios. La no-violencia es el medio de Él realización.
Oh Dios, oh Dios, qué cansado, duro, plano, y no rentable me parece que todos los usos de este mundo!
Es por la bondad de Dios, que en nuestro país tenemos estas tres cosas indeciblemente preciosas: libertad de expresión, la libertad de conciencia y la prudencia de no practicar nunca ninguna de ellas.
Pregunta con intrepidez incluso la existencia de un Dios, porque, si hay uno, debe más aprobar el homenaje de la razón, que de miedo con los ojos vendados.
Sólo quiero hacer la voluntad de Dios. Y él me permitió ir a la montaña. Y yo miré, y he visto la tierra prometida! Puede que no llegue allí con ustedes, pero quiero que sepan esta noche que nosotros, como pueblo, llegaremos a la tierra prometida.
Con malicia hacia nadie, con caridad para todos, con firmeza en el derecho, como Dios nos da para ver la derecha, esforcémonos para terminar el trabajo que estamos, a curar las heridas de la nación.
Dios no puede darnos una felicidad y la paz, aparte de sí mismo, porque no está allí. No hay tal cosa.
Un hombre puede disminuir no más la gloria de Dios por negarse a adorar a un loco puede apagar el sol junto a garabatear la palabra, "oscuridad" en las paredes de su celda.
Talento es Dios dado. Sé humilde. La fama es dado. Sea agradecido. La vanidad es la auto-da. Tenga cuidado.
Libertad prospera cuando la religión es vibrante y se reconoce el imperio de la ley en virtud de Dios.
Esa profunda convicción emocional de la presencia de un poder racional superior, que se revela en el universo incomprensible, forma mi idea de Dios.
El concepto teológico, filosófico y antropológico de Dios hace referencia a una suprema deidad. Dios es el nombre que se le da en español a un ser supremo omnipotente y personal en religiones teístas y deístas (y otros sistemas de creencias) quien es: o bien la única deidad, en el monoteísmo, o la deidad principal, en algunas formas de politeísmo, como en el henoteísmo.