Me ha dado por la filantropía. En vez de pagar impuestos voy a destinar mi dinero a la Fundación para el Cuidado y Mejora de Mr. Groucho Marx.
Harpo heredó las cualidades de mi madre: amabilidad, comprensión y cordialidad. Yo heredé lo que quedaba.
Conozco a centenares de maridos que serían felices de volver al hogar si no hubiese una esposa esperándoles.
En materia de animales domésticos, no hay ninguno que se pueda comparar con una sencilla corista carente de pedigrí.
Lo malo de hacer sugerencias inteligentes es que uno corre el riesgo de que se le asigne para llevarlas a cabo.
Lo bueno de las revistas musicales es que convives con treinta o cuarenta coristas que exhiben partes de su anatomía que en otros ámbitos reservan para el hombre con el que se casan.
Humphrey Bogart vino la otra noche a casa y acabó completamente borracho, algo por otra parte, bastante normal en él. Cuando va cocido es un pelmazo, pero la verdad es que no mejora mucho cuando está sobrio.
Hija, ¿dónde conociste a ese tal Daniel? ¿En un ascensor? ¿Subía o bajaba? Porque cuando un ascensor baja produce una sensacion en el estómago que puede confundirse con el amor.
No estoy seguro de cómo me convertí en comediante o actor cómico. Tal vez no lo sea. En cualquier caso me he ganado la vida muy bien durante una serie de años haciéndome pasar por uno de ellos.
Descubrí que los gustos de la mujer con la que conviví durante dos años eran exactamente como los míos: a los dos nos encantaban las chicas.
¿Que por qué estaba yo con esa mujer? Porque me recuerda a ti. De hecho, me recuerda a ti más que tú.
Solo hay una forma de saber si un hombre es honesto: preguntárselo. Y si responde "sí", sabes que es un corrupto.
Con el paso de los años he ido simplificando mi vida hasta lo único que tiene una importancia capital: el juego y el sexo.
Es una tontería mirar debajo de la cama. Si tu mujer tiene una visita, lo más probable es que la esconda en el armario. Conozco a un hombre que se encontró con tanta gente en el armario que tuvo que divorciarse únicamente para conseguir donde colgar la ropa.
Hasta que uno no se ha limpiado los zapatos con el vestido nuevo de la esposa, no sabe nada del amor... ni de la esposa.
Ya soy viejo. Lo más guarro que mi mujer y yo logramos hacer es sentarnos el uno frente al otro y hacernos mutuamente la manicura.
Recordad que estamos luchando por el honor de esa mujer, lo que probablemente es más de lo que ella hizo jamás.
Durante un tiempo fui socio de un club en el que mujeres y hombres comían en salones separados. De entonces proviene seguramente mi afición a travestirme y a visitar los servicios cada diez minutos.
Humor es posiblemente una palabra; la uso constantemente. Estoy loco por ella y algún día averiguaré su significado.
Mi nueva esposa cocinó ayer por primera vez. Probé un bocado, saqué el coche del garaje, tomé una habitación en el Beverly Wilshire y allí pasé tres días dudando entre el suicidio o el divorcio.
Si las mujeres se vistieran para los hombres, las tiendas no venderían demasiado. A lo sumo un par de anteojos de sol cada tanto tiempo.
Humor o humorismo (del latín: humor, -ōris) es definido como el modo de presentar, enjuiciar o comentar la realidad, resaltando el lado cómico, risueño o ridículo de las cosas.