Una memoria retentiva puede ser una gran cosa, pero la capacidad de olvidar es el símbolo verdadero de la grandeza.
No se necesita mucha fuerza para hacer las cosas, pero se requiere una gran fuerza para decidir qué hacer.
Un fallo es un hombre que ha cometido un error, pero no es capaz de sacar provecho de la experiencia.
La música es la única entrada incorpórea al mundo superior del conocimiento que abarca la humanidad, pero que la humanidad no puede comprender.
Yo prácticamente no tengo vida privada. Ya estoy acostumbrado a esto y preparado para ello. Sí, a veces es difícil, pero es la elección que hice.
Tengo dos premios de Bota de Oro en casa. Sería bonito ganar otro, pero no me importaría si no lo logro.
Siempre pensé que quería jugar profesionalmente, y siempre supe que para hacer eso tendría que hacer muchos sacrificios. He hecho sacrificios al dejar Argentina, dejando a mi familia para empezar una nueva vida. He cambiado mis amigos, mi gente. Todo. Pero todo lo que hice, lo hice por el fútbol, para lograr mi sueño.
Nunca he dejado de ser argentino, y nunca he querido dejar de serlo. Me siento muy orgulloso de ser argentino, a pesar de que me fui de allí. He sido claro acerca de esto desde que era muy joven, y no he querido cambiar. Barcelona es mi casa, porque tanto el club como la gente de aquí me lo han dado todo, pero no voy a dejar de ser argentino.
La verdad es que mi idea ha sido la de permanecer siempre en Barcelona y acabar el resto de mi carrera aquí. Como siempre digo, no se sabe lo que puede pasar en el futuro, pero si fuera por mí, me quedaría en el Barcelona por el resto de mi carrera.
No estoy en las cabezas de los jugadores, pero sé que si ganamos damos un paso de gigante en la Liga. Yo no soy psicólogo. Soy un tío que jugó al fútbol, y sólo tengo el título de entrenador y la selectividad. Mañana nos va la Liga, ganamos tres cuartos de Liga. Ésa es motivación suficiente.
Y creo que a causa de la pasión de todos los jugadores ingleses y todos los aficionados ingleses, y todos los periodistas ingleses para el juego, la mayor parte del tiempo se juega con pasión, amor por el fútbol e instinto. Pero en el fútbol también hay que pensar.
Yo no digo que seamos un equipo defensivo. Yo digo que somos un equipo fuerte en términos defensivos, pero al mismo tiempo carecemos de suficiente fluidez en el ataque debido a que se necesita tiempo para venir.
Pero yo creo que es muy normal que mi equipo no tenga mayor éxito que ganar dos Copas de Europa consecutivas.
La parte moral de la historia es no escuchar a los que te dicen que no toques el violín pero que cojas la pandereta.
El deporte serio no tiene nada que ver con el juego limpio. Está vinculado con el odio, los celos, la jactancia, haciendo caso omiso a todas las normas y el placer sádico de presencia violencia. En otras palabras, es como la guerra pero sin disparos.
Una situación trágica existe precisamente cuando la virtud no triunfa pero cuando todavía se siente que el hombre es más noble que las fuerzas que lo destruyen.
La mayoría de las personas tienen una buena cantidad de diversión en sus vidas, pero en balance la vida es sufrimiento, y sólo los muy jóvenes o los muy tontos imaginan lo contrario.
Las bombas atómicas se acumulan en las fábricas, los policías están rondando por las ciudades, las mentiras se transmiten desde los altavoces, pero la tierra sigue dando vueltas el sol.
Los eventos están predestinados pero requieren poco manejo. Ellos mismos se pueden administrar. Se deslizan en su lugar mientras dormimos, y de repente nos damos cuenta de que lo que tememos a la tentativa, ya está cumplido.
Pero el poder del amante es el poder del poeta. Podemos hacer el amor de todas las cadenas comunes con los que se encadenan en este mundo.
Mi superpoder es la invisibilidad. Pero sólo funciona cuando estoy en la barra de un bar tratando de pedir una copa.
Si uno pudiera elegir al gobierno en el mercado y no en la democracia, la abstención electoral tendría sentido. Pero aún no es el caso.
Se dice que la ciencia le quita magia a la vida, pero la próxima vez que veas las estrellas en el cielo sabiendo que tu estás hecho del polvo de sus explosiones nucleares, quizás sientas que la ciencia le devuelve algo de magia a la vida.
La violencia engendra violencia, como se sabe; pero también engendra ganancias para la industria de la violencia, que la vende como espectáculo y la convierte en objeto de consumo.
Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de los dioses, pero la verdad es que trabaja, como un desafío candente, sobre las conciencias de los hombres.
Soy un escritor que quisiera contribuir al rescate de la memoria secuestrada de toda América, pero sobre todo de América Latina, tierra despreciada y entrañable.
Los políticos no son necesarios, pero ellos nos convencen de que los necesitamos para resolver problemas que, sin ellos, no existirían.
En España nadie se plantea nada desde una perspectiva moral; este es un país de salvajes y de cafres; España vista desde el extranjero resulta un país ridículo, siempre estamos peleándonos con nuestra sombra y los extranjeros se quedan atónitos cuando ven lo que pasa aquí (...) El espíritu de la Guerra Civil está tan vivo como entonces, lo que pasa es que no tenemos un ejército levantisco, hay prosperidad y la gente no se va a echar a la calle, y estamos en Europa, pero las líneas de fuerza son las mismas: los separatismos, los problemas con la Iglesia, el rumor de sables, y la cuestión pedagógica y de la enseñanza...
Quienes nos visitan son jubilatas del imserso británico, turistas de alpargata sudada y gamberros del Liverpool, por así decir. Estrabón, Hemingway, Orson Welles y Ava Gardner ya no vienen. Venían cuando en España había pueblo, carácter, originalidad, personalidad, vida y filosofía propias. Ahora sólo hay borregos numerados: plebe. Soy duro, lo sé, pero también sincero. Y mi sinceridad me obliga a decir que España, en contra de lo que el triunfalismo de muchos espñaoles cree, es uno de los peores lugares de la Tierra para vivir. Se vive bien donde las cosas funcionan, donde el pícaro no es un modelo a imitar y donde la gente está bien educada. Todo lo demás lo pone uno.
Después del recorrido que he hecho por España, después del recorrido que he hecho por la Guerra Civil, he llegado a una conclusión y tengo que decirla. Ya se que se me va a atacar por esto, pero escribir es un oficio de samuráis que consiste en poner las tripas, en negro sobre blanco, encima de la mesa y lo digo: Lamento profundamente haber nacido español. Lamento haber nacido en un país donde la envidia es pecado capital. Lamento haber nacido en un país donde cada 30 o 40 años a lo largo de muchos siglos ha habido una guerra civil, donde los hermanos se han masacrado entre ellos, no por grandes causas, sino por una herencia, por una cuestión de cuernos, por una mujer,... por una pasión. Lamento haber nacido en un país tan mal educado. Lamento haber nacido en un país donde existe la telebasura. Lamento haber nacido en un país tan zafio, tan vulgar, tan encanallado.[...] En España se ha asumido el modelo del pícaro. Cuando el pícaro es un delincuente y lo que tendría que hacer es estar entre barrotes, en este país el pícaro es un héroe y eso crea el mayor número de sinvergüenzas por metro cuadrado del mundo.[...] Vivir en un país donde estamos todos con la mosca detrás de la oreja, donde creemos que el fontanero, el pintor, el de la tienda de ultramarinos, el periodista, el colega... te están engañando, eso genera una tensión, un estrés, una infelicidad, que es lo que me lleva a mi a decir que lamento profundamente haber nacido español.
En Tokio, un día, me topé con unas lolitas, pero no eran unas lolitas cualesquiera, sino de esas que se visten como zorritas, con los labios pintados, carmín, rímel, tacones, minifalda (...) Tendrían unos trece años (...). Subí con ellas y las muy putas se pusieron a turnarse. Mientras una se iba al váter, la otra se me trajinaba.
Pero la verdad es que yo no echo de menos a mi padre. Mi madre seguía enamorada de mi padre. Y yo dormía con ella, claro que castamente. Yo no lo echaba de menos, y es porque yo soy mi padre. Siempre quise ser lo que era mi padre, director de cuatro agencias de prensa, el ciudadano Kane del periodismo de aquella época..., el periodista más brillante...
Avanzar, conseguir lo que te propones... supone esfuerzo. Entrenamiento, sufrimiento... ¿Existe la suerte? No lo sabemos, pero lo que sí sabemos es que todo está en nuestras manos... Un nuevo día, un nuevo reto.
El cronómetro existe pero el reto de verdad es terminar... lo importante es intentarlo hasta el final. Lucha y agota todos tus recursos. La clave está en no rendirse con facilidad.
Creo que Hollywood tiene un sistema de clases. Los actores son como los internos, pero la verdad es que lo están convirtiendo en un asilo.
Siempre vuelvo a cómo se comporta la gente. Si observas cómo la gente se comporta en una situación, es muy sencillo y honesto y contenido. No necesitas utilizar mucho la expresión ni mucho sentimiento. Algunos personajes se desbordan, y eso es otra cosa, pero muchas veces pienso que eso lo puedes hacer muy, muy poco.
Siempre les digo a los actores cuando van a una audición: ¡No tengáis miedo de hacer lo que vuestros instintos os dicen. Puede que no entiendas el tema, pero la gente lo notará.